Después de un par de años de evadir la responsabilidad de escribir un artículo para el Blog del H Studio para el cual laboro desde hace algunas cuantas primaveras, llegó ese temido correo de inicio de mes por parte del área de cultura del estudio, el cronograma mensual de las actividades a realizar por cada uno de los integrantes del estudio y sí, apareció por primera vez mi nombre en la parte de Artículos para BLOG con la leyenda:
“EMMA NO ME MATES, YA TE TOCABA”
Cabe mencionar que nunca evadí esa responsabilidad como tal, simplemente nunca llegó ese llamado a tan importante misión. Amante del futbol (Chivahermano) desde que tengo uso de razón y, como la mayoría de los niños de este país, siempre quise ser futbolista profesional y también como casi todos los niños y jóvenes de este país, me “chingué la rodilla” y tuve que estudiar para sobrevivir de alguna manera.
Ingeniero en sistemas de profesión, egresado del Instituto Tecnológico de Querétaro (ZORRO), en donde en esos 4 años y medio que duró mi carrera en tan entrañable escuela, jamás pensé terminar trabajando en un estudio de diseño gráfico y mucho menos que me terminara gustando tanto como en la actualidad. Después de jugarle al emprendedor con algunos amigos de la carrera por 6 años, por azares del destino terminé trabajando en Tipos Libres, donde según yo, solo sería un jale temporal mientras encontraba algo más afín a mi carrera. De ese día a la fecha han pasado 16 años.
En aquellos años solía trabajar con un programa llamado FLASH de Macromedia que para la mayoría de los lectores de este blog es historia, algo así como lo son los cassettes, los walkmans o, incluso, las memorias USB que, en su momento, almacenaban 32 MB, que era una maravilla en aquellos años y podíamos guardar hasta 4 canciones MP3.
Ser programador de Actionscript me abrió muchas oportunidades laborales en su momento y me decidí por este estudio porque me gustaba mucho visualmente lo que hacían, ya que era unos de los pocos estudios que manejaban Flash en aquellos años y la verdad fueron los únicos que respondieron mi correo cuando buscaba trabajo.
En la entrevista conocí a Eduardo Espinoza, director y dueño de Tipos Libres y extrañamente alejado de la media nacional me cayó bien (risas), tal vez porque tenemos muchas cosas en común, como el gusto por el café, viajar, el humor negro y soltar comentarios inapropiados en el peor momento de alguna plática.
Empecé trabajando en el área web con La Flak, con mi entrañable amigo Carlos Polo (ingeniero en sistemas), luego se unieron Alan (diseñador), Omar(diseñador), pasando por Iván, Javier, Toñito y algunos otros que han sido parte del área de web, todos ellos siempre compartiendo el mismo objetivo: hacer proyectos a la medida de cada cliente y nunca repetir propuestas.
Con el paso de los años, invariablemente las cosas van cambiando, las plataformas se van actualizando y los lenguajes de programación van mejorando y evolucionando, se dejó de usar Actionscript y tuvimos que migrarnos a otros lenguajes y plataformas de programación. Surgió la necesidad de usar javascript, Ajax, bases de datos, asp, php, etc. y varios recursos para seguir evolucionando en el desarrollo de sitios y plataformas web y siempre con el mismo lema que tienen los flamantes diseñadores del estudio:
“SE TIENE QUE VER IGUAL QUE EN EL DISEÑO”
Al principio, un poco renuente a este dicho de mis compañeros y amigos, hubo muchas discusiones, portazos y varias mentadas de madre. Al poner todo esto en perspectiva, con el paso de los años, me doy cuenta que lo único que hicieron fue subir el nivel de mi trabajo, muchas veces cuando platicaba con Alan u Omar acerca de un nuevo proyecto y me decían había un botón curvo en la esquina superior derecha que le dije al cliente “puede hacer esto”, al final se tenía que hacer sí o sí, ya que se le había prometido, sin importar si eso me implicaba 10 o 100 líneas de código.
Nunca pasó por mi cabeza que al subir aquellas escaleras de las antiguas oficinas en Río Támesis, duraría tanto tiempo trabajando en este estudio de diseño, posiblemente la diversidad en los proyectos en los cuales me he involucrado, tan distintos uno de otro, sea tal vez el secreto de mi larga estadía en este trabajo, siempre se hacen cosas distintas que no nos encasillan en algún rubro, nuestros clientes nos permiten tener la mente e ideas frescas, bueno, eso y que siempre hay algún partido de futbol por ver y hacen más llevadera la jornada laboral.
Ha sido un largo recorrido por este estudio, experiencias buenas y malas, como en todos los trabajos. Para que me terminen de conocer, otra de mis actividades dentro del estudio, específicamente en el DH, es estar a cargo de las presentaciones del congreso y de que todo en el escenario fluya bien: las cortinillas, ponencias, micros, audio, video, etc., esa tarea de que todo salga perfecto aún la tengo pendiente, espero algún día conseguirlo y así hacerle pasar menos corajes al patrón.
Sí, un ingeniero en un estudio de diseño gráfico, ese soy yo.
Si llegaron al final de este artículo, les dejo mis redes sociales, por si quieren conocer un poco más de mí, seguirme y así pasar la barrera de 30 seguidores, sería fantástico de su parte. También les dejo algunos de los apodos que me dicen mis compañeros del estudio que, dicho sea de paso, apenas me están empezando a caer un poco bien, después de 16 años.
El señor del cuartito
El inge
Emma
El jalacables
El programador
May
Redes
X – @esebalon
IG: _soyemmaa
